Una oficina de crédito de Orotina era blanco de varios disparos en la mañana de este viernes, un hecho que ha generado gran preocupación en la comunidad local. La situación es alarmante, sobre todo teniendo en cuenta que se trata de un lugar donde muchas personas realizan transacciones financieras importantes.

La fuerza pública y la Autoridad de Investigación Judicial (OIJ) confirmaron el incidente, que aparentemente fue llevado a cabo por dos hombres que iban en una motocicleta. Este ataque no solo pone en riesgo la seguridad de los ciudadanos que visitan el local, sino que también plantea preguntas sobre la seguridad pública en general en Orotina. (Ver video adjunto de Soapoticias)

Las autoridades creen que el lugar es parte del negocio de un hombre conocido como Bustos, apodado «negro». Bustos, además, es sospechoso de la desaparición de su compañero, quien permanece arrestado junto a la modelo Rashab García y su amigo, Nelson Pavón. Esto sugiere que el ataque podría estar relacionado con actividades delictivas más graves que involucran a esta figura local.

De hecho, el negocio ha estado cerrado desde el martes pasado, día en que él entregó información a la policía judicial sobre varios delitos que se estaban llevando a cabo en la zona. Esto provoca especulaciones sobre si su cierre estaba vinculado a sus revelaciones o si era una estrategia para evitar represalias.

La estructura presentada 12 disparos en cortinas de metal, según un equipo de Telenotia de lado. Esto subraya la violencia que se ha apoderado de algunas áreas de la región.

Sin embargo, el hecho fue aconsejable un asesinato que ocurrió en una tienda de comestibles cercana alrededor de las 7:30 p.m. del jueves. Este suceso fatal ha dejado a los residentes todavía más angustiados, generando un clima de temor e incertidumbre.

Por el momento, la Autoridad de Investigación Judicial tiene información sobre la víctima, que también lleva el apellido García. Esta persona fue al intercambio para participar en la llamada de varias personas. Sin embargo, al estar en este lugar, fue sorprendido y ejecutado por ocho disparos. La brutalidad de este ataque refleja una creciente violencia que inquieta a la comunidad.

El insulto era un electricista, y sus vecinos lo recordaban como una persona de buenos modales y respetuosa. Tranquilo, respetuoso, trabajador y originalmente del área, son algunas de las palabras con las que sus amigos y familiares lo describen en medio de este trágico evento. Los mismos residentes dijeron estar preocupados por la situación de incertidumbre que se vive en el Cantón de Alajuelsen y solicita a las autoridades más medidas de seguridad.