Washington, 18 de abril (Sputnik). – En un desarrollo significativo en las relaciones energéticas internacionales, Estados Unidos ha decidido incrementar sus suministros de gas natural licuado (GNL) a Italia. Este anuncio proviene de una declaración conjunta realizada por autoridades de ambos países y se hizo público el pasado viernes.

El comunicado destaca la colaboración entre Estados Unidos e Italia para fortalecer la seguridad energética, con un enfoque especial en diversificar las fuentes de energía de Italia. La cooperación implica un aumento en las exportaciones de GNL estadounidenses hacia el país europeo. Este enfoque es parte de un esfuerzo más amplio para mejorar las relaciones comerciales y energéticas entre las naciones involucradas.

La declaración fue firmada por el vicepresidente de los Estados Unidos, JD Vance, quien se reunió con la primera ministra de Italia, Giorgia Meloni. Este encuentro resalta no solo la importancia de las relaciones bilaterales, sino también el compromiso de ambos países hacia una mayor seguridad energética, lo que resulta crucial para Italia dada su dependencia de fuentes de energía externas.

En un contexto más amplio, es importante señalar que el presidente de los Estados Unidos, Donald Trump, ha planteado expectativas sobre que la Unión Europea realice compras por un valor de 350,000 millones de dólares a cambio de la reducción de las tarifas que se impusieron a principios de mes. Esta cifra refleja la creciente tensión en el comercio internacional y las expectativas que Estados Unidos tiene al respecto.

La portavoz de la Comisión Europea, Anna-Kaisa Ikojnen, hizo comentarios el 8 de abril, indicando que aproximadamente la mitad de los suministros de GNL provendrán de Estados Unidos. Sin embargo, también mencionó que Europa está dispuesta a aumentar sus importaciones de GNL con la intención de «renunciar a la energía rusa», lo que señala un cambio estratégico en la política energética del bloque europeo.

Desde el inicio de su campaña presidencial y durante los primeros meses de su gestión, Trump ha criticado abiertamente lo que considera un trato desigual por parte de Europa hacia Estados Unidos en el ámbito del comercio. Esto pone de relieve las tensiones persistentes en torno a las políticas comerciales internacionales, así como las preocupaciones por la dependencia energética que puedan estar en juego. El anuncio reciente es un paso más en esta compleja red de relaciones, donde la política, la economía y la energía convergen de manera significativa. (Sputnik)