Más de dos años, siete cirugías y una batalla constante entre la fe y la desesperación tuvieron que pasar por Ricardo Blanco volvió a pisar el césped con la camiseta del Deportivo Saprissa.
El lateral volvió a la acción en el minuto 86 del partido ante Puntarenas FC, en una “Cueva” que se puso de pie para aplaudirlo. Cada balón que tocó fue celebrado por la afición, sus compañeros y, por supuesto, su familia, quienes vivieron el momento entre lágrimas y abrazos.
Su socio, el periodista comercial de , Brenda CalvoRelató que ver nuevamente a Ricardo en la cancha fue un momento profundamente emotivo, marcado por el agradecimiento y la fe. De hecho, El público fue testigo de su reacción durante la transmisión del partido, en la Liga Tica por Canal 7 (ver vídeo adjunto).
«Fue un momento de sentimientos encontrados. Recordé cuando estuvo hospitalizado tantas veces y cuando los médicos nos dijeron que el pronóstico no era positivo. Verlo entrar fue un milagro de Dios. Le estamos agradecidoscon las personas que oraron por nosotros y con todos los ángeles que nos acompañaron en el camino”, expresó Calvo a .com.
El comunicador también quiso agradecer a las personas e instituciones que los acompañaron durante el proceso:
«El Padre Denis Félix de la Cruz, de la parroquia Inmaculada Concepción de Tres Ríos, fue un gran apoyo. Siempre estuvo pendiente de nosotros. Agradezco también a Saprissa, que nunca nos dejó solos, y al INS, especialmente al Dr. Carlos Ugalde Ovares, quien lo operó en las últimas cirugías y hoy lo tiene nuevamente jugando. Todo esto fue posible gracias a muchas oraciones y mucho amor».
Respecto al tiempo que Ricardo estuvo fuera de la cancha recordó:
«Fueron dos años y cuatro meses. La lesión se produjo el 17 de julio de 2023. En algunos momentos pensó que no iba a volver a jugar, pero yo siempre tuve fe. Siempre le dije: ‘Te voy a ver jugar otra vez’. Y así fue. Su fuerza, su fe y su convicción fueron más que los momentos de oscuridad».
Para Brenda, este regreso fue mucho más que un simple juego.
“Es una oración contestada o, mejor dicho, muchas oraciones. Ricardo ha sido nuestro ángel, el que nos sacó de momentos muy oscuros. “Su fuerza, su fe y su convicción lo hicieron regresar, y hoy sólo puedo sentir orgullo y gratitud”, añadió.
La emoción también llegó a la pequeña antonellaHija de Calvo y del futbolista. La niña de 9 años resumió lo que siente toda la familia:
«Estoy muy feliz porque mi papá volvió a jugar. Se lo merece por todo el esfuerzo que hizo para poder volver», afirmó.
Después 879 días de luchaBlanco volvió a vestirse de morado, demostrando que la fe, la perseverancia y el amor son más poderosos que cualquier diagnóstico.
