Él Club Deportivo Herediano atraviesa su quinto año de construcción del nuevo Estadio Eladio Rosabal Corderoy aunque el proyecto ha avanzado a paso firme, la vicepresidente de Fuerza Herediana, Aquil Alíreconoció que factores internacionales y logísticos han sido decisivos en el retraso.
Según Alí, el proyecto—que comenzó en enero 2020 con el objetivo de albergar 12 mil fans— ha enfrentado obstáculos que van desde pandemia de COVID-19 hasta el aumento de aranceles e impuestos sobre productos importados de Chinaderivado de las decisiones económicas del expresidente de Estados Unidos, donald triunfo.
«Hay muchos factores que han influido en el retraso en la construcción del estadio. Por ejemplo, los aranceles que sube y baja el presidente de Estados Unidos provocan que el precio de los contenedores, de donde provienen las piezas del estadio, no sólo aumente, sino que también haya retrasos en los envíos», explicó el dirigente en declaraciones a Radio Colombia.
Retrasos en materiales y rotación de personal
Ali indicó que Algunos pedidos de Asia llevan más de tres semanas esperandoy podría tomar hasta un mes más para llegar al país.
Esta situación ha obligado a la empresa a transferir trabajadores de un sector a otro dentro del proyecto, reduciendo temporalmente el número de personal activo en el sitio.
“No siempre hemos tenido al 100% de la plantilla trabajando simultáneamente, pero esperamos que eso cambie en los próximos meses”, afirmó el vicepresidente.
Pese a las dificultades, Alí destacó que los retrasos también permitieron hacer mejoras de infraestructuracomo el inclusión de un hotel dentro del complejo deportivolo que convierte al Rosabal Cordero en una de las obras más ambiciosas del fútbol nacional.
Una obra que busca dejar huella
El dirigente reafirmó que la visión de Fuerza Herediana es dejar un legado para Costa Rica a través de un estadio 100% privadoConstruido con recursos del club y sin aportes estatales.
«Terminar el Rosabal Cordero no sólo será un orgullo para Herediano, sino también para el país. Es un proyecto privado, no como el Estadio Nacional, que fue un regalo del gobierno chino. Queremos dejar este legado y demostrar que otros equipos también pueden lograrlo», concluyó Alí.