El multimillonario Jeff Bezos, jefe de Amazon, está en Venecia para su boda, confirmó la AFP el miércoles, un evento que ha generado protestas en el turista de la ciudad.
Se vio a Bezos y su futura esposa Lauren Sánchez al ingresar al lujoso Hotel Aman ubicado en el Gran Canal, donde la noche cuesta más de 10,000 euros.
Las festividades comenzarán el jueves y terminarán el sábado con una ceremonia en un lugar secreto por razones de seguridad.
Según la prensa italiana, Bezos (61 años) y Sánchez (55 años), ambos divorciados, habrían reservado por completo los hoteles más lujosos de la ciudad para dar la bienvenida a sus prestigiosos invitados: desde Leonardo DiCaprio hasta Ivanka Trump, pasando por Mick J. JeMah Winfrey Winfrey, Orlando Bloom o Kim Kardashian.
La hija del presidente de los Estados Unidos llegó el martes por la tarde a Venecia, acompañada por su esposo Jared Kushner y sus hijos, confirmó un fotógrafo de la AFP.
El Yate de Bezos, el Koru, anclará ante la isla de San Giorgio Maggiore, ubicada justo en frente de la famosa Plaza de San Marco y eso se habría alquilado en su totalidad para esta fiesta.
Este desperdicio de lujo aumentó la controversia en Venecia, donde parte de la población teme que los invitados hagan una ciudad ya invadida por los turistas aún más inhabitables.
El lunes, un grupo de activistas de Greenpeace desplegó una pancarta gigante en la Plaza de San Marco con una foto de Bezos Rishing acompañado del mensaje: «Si puede alquilar Venecia para su boda, puede pagar más impuestos».
En los últimos días, los carteles estaban atascados con la inscripción «No hay espacio para Bezos» («No hay espacio para Bezos»).
Erigido a lo largo de los siglos en islotes en una laguna, Venecia implementó un controvertido boleto de entrada para los visitantes diarios, pero algunos reclaman políticas más ambiciosas para luchar contra la vivienda y la crisis demográfica en la ciudad.