Ciudad de Guatemala, Guatemala.– El entrenador Óscar “Macho” Ramírez no solo vivió una intensa final ante Xelajú, sino que también terminó bañado en medio de una conferencia de
Ciudad de Guatemala, Guatemala.– El entrenador Óscar “Macho” Ramírez no solo vivió una intensa final ante Xelajú, sino que también terminó bañado en medio de una conferencia de prensa como parte del festejo rojinegro tras el tricampeonato de Alajuelense en la Copa Centroamericana de Concacaf.
Justo cuando se dirigía a los medios, un grupo de jugadores ingresó a la sala para mojarla con agua fría, en una escena que provocó risas entre los presentes. Fue el cierre ideal de una noche histórica para el técnico, que celebró su primer título internacional.
“Es lindo ganar esto, pero imagina que ya estaba pensando en el domingo, en las semifinales… Ni siquiera estaba pensando en la conferencia”, dijo entre risas tras el incidente, dejando claro que ya está concentrado en la etapa decisiva del torneo nacional.
Para Ramírez, llegar al tricampeonato regional fue producto de carácter y resiliencia en los momentos críticos del torneo.
“La clave fue no rendirnos, porque tuvimos partidos muy difíciles, como los duelos contra los hondureños y los de Antigua. Ahora quiero felicitar a Xelajú, porque el profesor Amarini Villatoro tiene muy buena proyección”, afirmó.
El técnico no ocultó su emoción al referirse al portero Bayron Mora, quien fue figura en la tanda de penales tras la lesión de Washington Ortega.
«Lo de Bayron es felicitar al entrenador de porteros (Diego Cejas). Esto es una cuestión de constancia, cuanto más trabajas más te ayudan los de arriba. A sus 22 años ha demostrado una gran personalidad. Nos deja tranquilos porque tenemos un gran proyecto de futuro», expresó.
Ramírez destacó que en la ida fueron partidos por las contras del Xelajú, pero en la vuelta optaron por no dividir el bloque.
«Tuvimos chances del 1-0, pero nos faltó definición. Cuando empataron, fueron más dinámicos. Rescato el carácter de los muchachos para cerrar bien con los penales», afirmó.
También reconoció momentos de tensión, como cuando los chapines estrellaron un balón en el poste. «Hubo momentos críticos. En Alajuela tuvimos dos penales y no los ejecutamos. Ahora con mejor definición lo solucionamos más rápido, pero enfrentamos a un gran equipo».
Al ser consultado sobre cómo mantiene enfocado al grupo, Ramírez destacó la unidad interna.
«Hay una palabra que digo mucho: cuando uno trabaja físicamente se sufre, pero cuando hay sentimiento hay un extra… Se ven como una familia, se ayudan. No es fácil lo que se está logrando y cómo se apoyan. Todos estaban felices por Bayron Mora», dijo.
Respecto a las declaraciones del técnico Amarini Villatoro, quien aseguró que Xelajú estaba mejor, Ramírez fue enfático pero comprensivo.
«Se entiende que es un chico joven. La esperanza se trunca. Quería ganar y es comprensible. Todavía le digo que tendrá más oportunidades y se las pueden dar. Hay que aprender de las derrotas», concluyó.
