Él es Orco, un pastor belga malinois que lleva ocho años trabajando en detección de drogas para el Departamento de Policía de la ciudad de San José. (ver vídeo adjunto).

Los perros como Orco suelen utilizarse para estas tareas durante siete años, pero fue aprobado por un año más.

Tras la jubilación pasa a manos de una persona que le proporciona los cuidados necesarios.

Orco está “retirado”, pero sus sucesores ya están allí. Son cinco hermanos, el pastor belga malinois de 10 meses.

“Contamos con tres mujeres y dos hombres que trabajan tanto en la detección de armas como en la detección de drogas. Hacen todo el proceso de formación desde pequeños, desde los tres meses reciben capacitación en detección de drogas, en este caso también les enseñaron detección de armas y bueno, desde los tres meses ya estaban trabajando”.dijo Cruz Portilla del Departamento de Policía de la ciudad de San José.

Orco había sido donado por el gobierno de Estados Unidos.