Una iniciativa legislativa ha causado preocupación en el sector transporte al proponer autorizar el uso de vehículos tuk-tuk para el transporte de pasajeros en Costa Rica.
Según representantes de la Cámara Nacional de Transporte, el proyecto no garantiza condiciones adecuadas de seguridad ni justicia a los operadores formales. Advierten que la eventual aprobación de esta medida podría representar un retroceso para la seguridad vial, la regulación técnica y la sostenibilidad del sistema de transporte público.
Los empresarios señalan que los tuk-tuks no cumplen unos estándares mínimos de estabilidad ni de protección de los pasajeros, lo que podría aumentar los riesgos tanto para los conductores como para los usuarios. Además, advierten que las pólizas de seguro actuales no incluyen cobertura para este tipo de vehículos, dejando a las personas sin protección en caso de accidente.
Otro punto crítico es que la propuesta permitiría rutas de larga distancia, incluso en rutas ya autorizadas para el transporte público, lo que podría dar lugar a conflictos operativos y legales.
El texto legal estipula el uso de un permiso de conducir de clase A emitido por al menos tres años, así como un seguro de responsabilidad voluntario. También autoriza al Consejo de Transporte Público a implementar planes piloto para evaluar la viabilidad del servicio en diferentes regiones del país.
Los empresarios insisten en que el uso de los tuk-tuks debería limitarse a zonas turísticas o rutas cortas. Mientras tanto, los legisladores tendrán que decidir en los próximos días si el proyecto avanzará en el Congreso.