Una familia que sobrevivió a un espectacular accidente de tránsito en el que cayeron con todo y su vehículo a un acantilado de 150 metros de altura compartió con Telenoticias los minutos de miedo que vivieron.
“Dios nos dio una segunda oportunidad, somos un milagro porque cuando los veo me pongo a pensar en lo que hubiera pasado si uno de ellos me hubiera matado”, dijo Ratzel Fuentes, la madre sobreviviente.
El accidente ocurrió el 22 de octubre en la Ruta Nacional 10 a la altura de Turrialba, cuando se dirigían a Heredia para pasar unos días en la casa de la madre de Ratzel.
«Cuando estábamos en la carretera estaba como aceite y piedra y llovía mucho. En ese momento el auto empezó a moverse para todos lados, nos caímos, empezamos a dar vueltas y vueltas hasta llegar al fondo. Sólo Dios sabe por qué estamos aquí porque fue terrible. Empezamos a gritar, a llorar, todo», dijo la mujer.
En el vehículo también viajaban su cuñado, su padrastro y sus tres hijos pequeños de 8 años, 5 años y 8 meses. El coche quedó completamente destruido al pie del acantilado.
«Cuando salimos de allí, mi hijo nos ayudó mucho. Es autista. Nadie nos escuchó gritar. Estaba oscureciendo, el río empezó a crecer, llovía mucho. Preguntamos si estábamos todos bien, teníamos miedo. Dimos gracias a Dios. Mi hijo de cinco años dijo una oración cuando bajamos del auto», agregó.
Los minutos al pie del acantilado parecieron eternos para esta familia, mientras que las labores de rescate duraron más de cinco horas.
Ahora quieren enviar un mensaje de agradecimiento: «Estoy muy agradecido con las personas que nos ayudaron y que ni siquiera nos conocen por sus mensajes y oraciones. Hay que cuidarse mucho».
Increíblemente, los tres menores resultaron completamente ilesos; Ratzel sólo sufrió un desgarro y hematomas.
La joven madre es empresaria y perdió todos sus bienes en el accidente. Si deseas apoyarlos, puedes hacerlo a través del SINPE al 7269-4796.