Mientras los focos se preparan para iluminar la noche de cine en mira quien esta bailando (MQB), un grupo de manos expertas trabaja entre agujas, telas y creatividad para que cada paso sobre la pasarela brille como un escenario de Hollywood.

Detrás de los brillos, máscaras y chaquetas de época está Sandra Castro, quien dirige el departamento de vestuario de Formatos durante más de una década. Su misión y la de su equipo es conseguir que las estrellas y sus parejas de baile se conviertan en iconos del cine. Cada detalle, desde el color de una corbata hasta el drapeado de una falda, cuenta para darle vida a la magia frente a las cámaras.

En entrevista con .com, Castro compartió los desafíos y anécdotas detrás de cada diseño.

“No es sólo que se parezca, tiene que funcionar para bailar”

Sandra explica que una gala de cine requiere un trabajo doblemente cuidadoso, porque no se trata sólo de imitar un disfraz, sino de adaptarlo para que los participantes puedan moverse libremente por el suelo.

​“Lo principal es que se parezca al personaje, pero también que facilite al bailarín y a la estrella realizar todos los pasos de su coreografía.

“No es lo mismo hacer un disfraz para una foto que hacer una coreografía de baile”, afirmó.

La misión es clara: que el público identifique inmediatamente la película con solo ver el outfit, pero sin que esto limite la comodidad de quienes deben ejecutar exigentes coreografías.

Una semana para lucir la magia

El tiempo es un factor crucial. Castro reveló que el equipo tiene apenas una semana para resolver todo el vestuario una vez definido quién continúa en competencia.

​«En una semana se hace, se selecciona en el almacén o se alquila en locales de vestuario. Hay tres formas de trabajo que utilizamos según las necesidades de cada personaje», explicó.

Los ajustes se realizan con precisión milimétrica, ya que el ensayo técnico tiene lugar el viernes previo a la gala, cuando los bailarines se prueban el vestuario para asegurarse de que todo se adapta correctamente a sus movimientos.

el mas desafiante

Esta semana, dos vestuarios se han robado el protagonismo: La Máscara y 50 Sombras de Grey.

“El de La Máscara lleva muchos elementos: chaqueta, corbata, sombrero… es muy recordado y debe lucir impecable”, explicó.

«Y el de 50 sombras de Grey tiene muchos accesorios: máscara, gafas, pajarita. Esos detalles marcan la diferencia».

Cada disfraz pasa por un proceso de selección de tejidos supervisado personalmente por Sandra, quien cuida cada textura y acabado para mantener la esencia de la película sin perder funcionalidad.

Trece años creando ilusiones

Con más de trece años de experiencia en el departamento de vestuario, Castro ha participado en innumerables producciones y recuerda con especial cariño los mayores retos.

​«Una vez hicimos El Rey León y tuvimos que vestir a todos los bailarines y extras como animales. Fue un trabajo enorme, pero muy bonito», recuerda entre risas.

“Disfruto tanto de mi trabajo que siempre hago un esfuerzo adicional”

Sandra confiesa que lo que más la motiva es poder contribuir a la magia que llega a los hogares cada domingo.

​«Aquí es importante el trabajo de todos, pero el vestuario tiene un papel muy especial. Disfruto tanto con lo que hago que trato de esforzarme para que todo luzca bien, funcione y se parezca al personaje que van a interpretar», comentó.

Para ella, la mayor recompensa es ver cómo su trabajo complementa el esfuerzo de bailarines, coreógrafos y maquilladores, logrando que cada número transporte al público a un escenario de película.

La gala de este domingo promete ser un viaje por clásicos del cine. Desde la apertura inspirada en Grease hasta las transformaciones de Titanic, El Loco Adams y baile sucio, el espectáculo promete brillantez, nostalgia y mucho corazón.

Cada pareja no sólo bailará por su sueño, sino también por las causas que apoya, en una competencia donde la solidaridad también se viste de gala.

Sigue la noche de cine este domingo a las 7 pm por Canal 7, .com y la aplicación TDMAX.