Por Elías Alvarado | [email protected]
La comunidad latina de Chicago tiene miedo a medida que aumentan las redadas antiinmigrantes por parte de agentes federales. En las últimas semanas, el gobierno de Estados Unidos ha detenido a más de 550 personas sólo en esta ciudad, en operativos que han generado fuertes críticas por su intensidad y supuestas irregularidades.
Imágenes difundidas por medios locales muestran enfrentamientos entre manifestantes y agentes federales en medio de protestas contra las detenciones. Organizaciones comunitarias y defensores de los derechos de los migrantes se quejan de que muchos de los arrestos se produjeron sin orden judicial ni debido proceso, e incluso se dirigieron a personas con la documentación adecuada o sin antecedentes penales.
Un costarricense radicado en Chicago habló con Telenoticias y compartió sus inquietudes:
«Todo lo que está pasando es un poco incómodo. Antes de salir de casa, tienes que buscar en Internet dónde están los agentes de ICE. Y no es que seas un criminal ni nada, sino que todos, incluidos los residentes de América del Norte, están siendo arrestados sólo por manifestarse. No sabes a dónde va a llevar todo esto».
Ante esta situación, abogados voluntarios e iglesias han comenzado a ofrecer refugio y asesoramiento jurídico gratuito a las personas afectadas, lo que consideran una grave violación de los derechos fundamentales.
La intervención policial ha sido cuestionada por el nivel de violencia y la forma en que se realizaron las detenciones, lo que ha levantado alarma entre las comunidades de migrantes y organizaciones de derechos humanos.