14 de agosto de 2025, 16:36 pm
Por Joaquín Alvarado Gutiérrez/ @Vamosalcine2025.
¿Y dónde está la policía? a nosotros Recuerde que la comedia puede renovarse, sorpresa y, sobre todo, hacernos hasta que el vientre duele.
La historia comienza con nuestra amada y despistada policía, que no se iría ni se encargaría de los refrescos del vecindario, recibiendo un caso que, para cualquier agente grave, sería la vida o la muerte. Pero, por supuesto, aquí la prioridad es otra, no tropezar con los zapatos en sí mientras intenta atrapar lo malo.
Y como si eso no fuera suficiente, en medio de esta «misión de alto riesgo» (por su dignidad), aparece su nuevo compañero, un hombre que sabe lo que es ser implacable … pero en dramas intensos, de aquellos que uno ve con su corazón arbustivo. Esta vez, la tuya será encoger el estómago del público … ¡ríete!
Porque sí, aquí tenemos un actor legendario, Liam Neeson Ese juega el papel principal (inspirado en el Teniente Frank Drebin Que hizo famoso Leslie Nielsen), propietario de una carrera con premios, premios y lágrimas en la pantalla, que ahora se atreve a reírse de sí mismo y demostrar que el comedia Es un desafío igualmente grande como el drama. Y va tan bien que uno se pregunta: «¿Por qué no lo hemos visto antes de lanzar chistes, en lugar de discursos solemnes?»
Frente a él, una icónica estrella de televisión y cine, Pamela Andersoncon una energía que parece funcionar basada en el café y la chispa natural pura. Es una de esas figuras que llenan la pantalla, que improvisan como si el guión fuera una sugerencia, y eso sabe exactamente cuándo dejar que el público respire entre la risa … aunque rara vez nos da esa oportunidad.
La trama avanza entre persecuciones donde se persigue la lógica que los villanos, interrogatorios que parecen tomados de un programa de humor y situaciones tan ridículas que no se sabe si aplaudir al guionista o pedirle que le preste un poco de su imaginación. Hay accidentes que no deberían sucederle a un policía, disfraces que lloren a un diseñador de disfraces y planes que, milagrosamente, terminan funcionando (más afortunadamente que por talento).
Pero más allá del humor, esta película tiene un gran mérito, logra traer generaciones. Los padres que crecieron con la franquicia revivirán ese espíritu absurdo que marcó el tiempo, mientras que los niños descubrirán un tipo de comedia que no necesita caer en lo vulgar para ser divertido. Y lo mejor, no debemos haber visto los anteriores para disfrutarlo.
Esta historia se mantiene sola y llega con toda la frescura de una propuesta que entiende que, si el público va al cine para reír, debemos darle muchas razones.
Entonces, ya sabes, prepara las palomitas de maíz, acompañas en tu sillón y disfruta de una misión donde la incompetencia es un arte, la amistad es más fuerte que la incomodidad y las risas están garantizadas.
¿Y dónde está la policía? No solo regresa, se reinventa, se actualiza y nos recuerda por qué el cine, cuando se hace bien, es la mejor excusa para salir de la rutina.