julio 13, 2025
Costa Rica

Costa Rica regresa a la violencia estructural, advierte un – Reporte Tico

  • junio 7, 2025
  • 0

San José, 7 de junio (Elpaíss.cr) .- Costa Rica viaja a un escenario de violencia estructural que se manifiesta en la confrontación política, la descomposición social y la

Costa Rica regresa a la violencia estructural, advierte un

 – Reporte Tico

San José, 7 de junio (Elpaíss.cr) .- Costa Rica viaja a un escenario de violencia estructural que se manifiesta en la confrontación política, la descomposición social y la fragilidad institucional, de acuerdo con el informe más reciente del análisis del programa de la sociedad de la costarricana, preparada por la escuela de sociología de la universidad nacional (una).

El documento, presentado esta semana, advierte que enfrenta una profunda crisis política y social marcada por el discurso con cara del gobierno, la creciente polarización institucional y un debilitamiento sostenido de los mecanismos de diálogo y consulta.

Según el coordinador del programa, el sociólogo Carlos Carranza, «la situación nacional se caracteriza por tensiones políticas, desafíos estructurales y un sentido generalizado de incertidumbre», que ha creado un entorno propicio para el progreso de la violencia estructural que, según el informe, «se expande a lo largo del territorio nacional».

Confrontación política y vacío institucional

Uno de los incendios más graves indicados por el informe es la confrontación entre la rama ejecutiva y otros actores en el sistema político. En particular, el estilo discursivo del presidente Rodrigo Chaves, quien ha tenido una confrontación constante con la Asamblea Legislativa, especialmente con su presidente Rodrigo Arias, así como con otras instituciones fundamentales como la Corte Suprema de Elecciones (TSE).

Este clima de voltaje se ha amplificado, advierte el estudio, por ausencia de una figura que articule el Ministerio de la Presidencia, que ha debilitado los puentes tradicionales entre el ejecutivo y otros. A esto se suma el uso repetido del veto presidencial como una herramienta para bloquear las facturas de interés gubernamental, que ha contribuido a «una atmósfera de polarización y debilitamiento del diálogo institucional», según Fernando Méndez, también miembro del equipo académico.

Uno de los eventos más simbólicos de esta confrontación fue la participación directa del presidente y su gabinete en una manifestación contra el Fiscal General, quien para los investigadores muestra un patrón de intervención inusual y arriesgado en la separación de poderes.

Retarto en los derechos humanos

Más allá del nivel político, el informe informa un giro a las políticas neo -conservadoras, con impactos tangibles en los derechos humanos, la atención minoritaria y la migración.

Entre los eventos más relevantes se encuentra la aceptación del estado de los migrantes expulsados ​​de los Estados Unidos, sin un protocolo claro para recibir o garantizar derechos. La posición ambigua del ministro de Relaciones Exteriores, Arnoldo André, también es criticada ante la Asamblea Legislativa y la emisión de un decreto que restringe el apoyo estatal a los Objetivos de Desarrollo Sostenible (ODG) y la Agenda 2030, los pilares tradicionales de la política internacional de la costa de Ricana en las últimas décadas.

«Estas decisiones no solo afectan a las poblaciones vulnerables d, sino que también debilitan la posición histórica de Costa Rica en el contexto internacional», dijo Carranza durante la presentación.

Violencia social y femicidios

Otro componente preocupante de la violencia estructural identificado por el informe es su manifestación diaria en eventos como los femicidios. Hasta este año, ya se cuentan 17 casos, una cifra que confirma una tendencia al alza y una falta efectiva de respuesta de las autoridades.

«Esta administración no ha podido revertir esta tendencia preocupante y sus acciones más bien revelan un desinterés en el fortalecimiento de las políticas públicas con un enfoque de género o una atención integral para las víctimas», dice el documento.

Real
El estudio también aborda los impactos de esta situación política en áreas clave del desarrollo social. Aunque se informa una ligera reducción en las tasas de pobreza, el informe advierte que la desigualdad económica continúa aumentando, el producto de los recortes presupuestarios de los programas sociales y el mal cuidado de las instituciones esenciales como el Fondo de Seguridad Social (CCSS) de Costa Rica.

Los problemas más graves incluyen el deterioro de la infraestructura hospitalaria, con el estancamiento de la construcción del nuevo Hospital Carthage, el aumento de las listas de espera, la renuncia de médicos especializados y el conflicto con las cooperativas que administran los Ebáis. Todo esto, dice el informe, es un reflejo del debilitamiento progresivo del costoso sistema de seguridad social.

Preocupaciones ambientales y falta, por supuesto

En cuestiones ambientales, el informe cuestiona la existencia de una política coherente. Casos tales como los árboles de tala en el Refugio Nacional de Vida Nacional Gandoca-Manzanillo han generado fuertes críticas a las organizaciones y comunidades locales, que el informe describe como una pérdida del curso en programas tradicionalmente emblemáticos para la sostenibilidad nacional.

«No está claro si el gobierno tiene una estrategia ambiental, o cómo los intereses públicos y privados se reconcilian en las decisiones que afectan directamente los recursos naturales y el bien de las generaciones futuras», advierte el análisis.

Infraestructura y transporte: avances limitados

El informe reconoce ciertos avances en la infraestructura vial, pero también indica una serie de obstáculos importantes. Ejemplos como el camino a Limón, las modificaciones de diseño originales con el reemplazo de los pasos superiores con las rotondas y las preguntas al nuevo paso elevado a Lima, Cartago, se citan como ejemplos de mala planificación.

Además, los proyectos estratégicos como el tren eléctrico están estancados, mientras que la atención insuficiente persiste en puentes y carreteras, como señaló el Laboratorio Nacional de Materiales y Modelos Estructurales (Lanamme) de la Universidad de Costa Rica (UCR).

Educación: sin hoja de ruta

Uno de los diagnósticos más graves en el informe está reservado para el sector educativo. La Universidad Nacional informa que ha estado sin una ruta clara en esta área, lo que ha llevado a una reducción de la inversión sin precedentes, un modelo organizacional obsoleto dentro del Ministerio de Educación Pública (MEP) y una necesidad urgente de renovar los planes de estudio.

«Después de tres años sin una ruta clara, el sistema educativo está estancado, con una inversión decreciente y una organización obsoleta, que compromete al futuro ciudadano», dijo Carranza.

El informe advierte que la falta de gestión y liderazgo en la educación compromete la capacidad d para generar talento humano competitivo y promover la movilidad social, que históricamente ha sido una de las bases del desarrollo costoso.

Comercio exterior bajo presión

El informe también enfatiza un panorama de la incertidumbre en el comercio exterior, exacerbado por la reciente imposición de tasas en las exportaciones de Costarricensus de EE. UU. Esta medida, según el análisis, ha demostrado la falta de una estrategia comercial nacional a largo plazo, que podría tener serias consecuencias para el sector de exportación nacional y la economía nacional.

Expectativas de sombra para el segundo semestre

El programa del programa de análisis conjunto concluye su evaluación con un pronóstico reservado para la segunda mitad de 2025. A menos que se genere esfuerzos institucionales y políticos deliberados para revertir el curso actual, el informe establece que la polarización e inestabilidad continuarán marcando la vida nacional.

«Todo indica que este será el tónico que prevalecerá durante el resto del año, especialmente si el presidente continúa fortaleciendo este clima a través de un lenguaje simbólico lleno de tensión», cierra el documento.

Ante este paisaje, los investigadores invitan urgentemente a la construcción de consenso, fortaleciendo el diálogo democrático y el renacimiento de las agendas sociales que garantizan los derechos humanos y la cohesión social.