El candidato presidencial para la liberación nacional, Álvaro Ramos, ha manifestado enérgicamente su desacuerdo con la denominada ‘ruta rápida’ que el gobierno pretende aplicar al proyecto de excepciones o 4/3 días. Esta iniciativa, que se encuentra en discusión en el plenario legislativo este lunes, requerirá el respaldo de al menos 38 votos, un objetivo complicado dada la fuerte oposición del frente amplio, que cuenta con seis votos, así como la resistencia histórica que caracteriza la postura de Ramos.
Durante su intervención, Ramos enfatizó la importancia de que los parlamentarios tengan la oportunidad de analizar exhaustivamente la pertinencia de la reforma propuesta, señalando que esto es fundamental para garantizar el bienestar de los trabajadores. “Este es un cambio profundo en las condiciones de trabajo de decenas de miles de trabajadores», afirmó Ramos. «Los legisladores deben poder entrar en detalle y realizar modificaciones si es que esto llega a ser necesario».
Al abordar su postura, Ramos destacó: “Debe haber un equilibrio entre los intereses de los empleados y los empresarios. Por lo tanto, resulta crucial fomentar el diálogo y la negociación. La vía rápida obstaculiza este análisis detenido del proyecto y puede llevar a que se apruebe sin el debido examen en el plenario legislativo. Por eso, nos oponemos a este mecanismo legislativo», declaró Ramos antes de la consulta con este medio.
El economista, que había expresado dudas sobre esta reforma durante la campaña interna, subrayó diversas preocupaciones específicas, incluyendo el impacto en la salud y el bienestar de los trabajadores y sus familias, así como los efectos potenciales en el empleo femenino y el debilitamiento de programas sociales como las redes de enfermería.
“Hoy, Costa Rica tiene una de las tasas de participación femenina en el empleo más bajo del continente y de la OCDE. Este cambio en la jornada laboral podría agravar este problema», insinuó.
Por otro lado, Ramos comentó sobre los argumentos de los partidarios de la reforma, quienes sostienen que el proyecto mejorará la certeza legal para las empresas. “¿Realmente creen que puede haber certeza legal en un gobierno como el actual? Un gobierno que constantemente amenaza y persigue a las empresas y cámaras de negocios por razones políticas», reflexionó Ramos.
En otro punto, el jefe de fracción de PLN, Oscar Izquierdo, mencionó recientemente que el banco considerará la decisión sobre esta ruta rápida el próximo lunes, aunque admitió que un voto bloque sería complicado. Sin embargo, las declaraciones de Izquierdo no tomaron en cuenta el punto de vista de Ramos, quien reafirmó que transmitiría oficialmente su posición al banco. «Tenemos una coordinación cercana y respetuosa», concluyó.
En el improbable caso de que el pleno logre un quórum perfecto el lunes, que involucra a 57 parlamentarios, la ruta rápida necesitaría contar con al menos seis votos del PLN, y es esencial que todos los parlamentarios, con excepción de algunas disidencias, apoyen la propuesta.